Anillo Ajolote

-Ajustables

**Favor de indicar la piedra deseada en notas al vendedor**

Mis nuevos collares y anillos de ajolotes nacen desde lo más profundo de mi amor por México.
No son solo joyas; son amuletos vivos que celebran nuestra historia, nuestra tierra y la fuerza que habita en ella.
El ajolote, símbolo sagrado de Xochimilco, representa la magia de la vida que se regenera.
Xochimilco no es solo un lugar: es el pulmón de la Ciudad de México, un espacio lleno de historia, cultura y tradición que ha resistido el paso del tiempo.
Es un patrimonio vivo donde aún existen campesinos que mantienen la ancestral práctica de sembrar en las chinampas,y guardianes que, con amor y paciencia, dedican su vida a proteger a los ajolotes para que no desaparezcan.
Ellos son los verdaderos custodios de nuestra memoria, de nuestra identidad y de la esperanza.

Siempre he sentido una conexión muy especial con el ajolote. Su capacidad de regenerarse (incluso después de perder partes vitales) me recuerda la fuerza del alma humana y la posibilidad constante de sanar.
Por eso, cada una de estas piezas fue creada con piedras semipreciosas de poderes muy especiales, elegidas por su energía de transformación, protección y sanación.
Cada piedra vibra distinto, pero todas comparten un mismo propósito: recordarnos que podemos renacer, sin importar cuántas veces la vida nos haya llevado al fondo.

Gracias al hotel Colima 71 por abrirme las puertas una vez más para compartir no solo mi trabajo, sino mi visión de México: un país lleno de historia, arte, naturaleza y magia.
A través de proyectos como este, y de la fortuna que tengo de poder dar tours por medio de Colima 71 por toda mi ciudad a extranjeros; puedo mostrarle al mundo lo que verdaderamente somos: un pueblo que ama, crea, lucha, protege y renace.

Estas joyas son un tributo al México que resiste, florece y se regenera…
Como el ajolote, como la tierra, como el corazón.